13 de abril de 2011

Jóvenes conductores, protagonistas en jornadas y estudios



En los próximos días tendrá lugar en la ciudad de Dénia (Alicante) las “II Jornadas Técnicas de Educación y Seguridad Vial“ organizadas por la Concejalía de Gobernación de su Ayuntamiento. Las jornadas que se celebrarán en el Centro de Desarrollo Turístico están dirigidas a policías locales, profesionales de la educación, de la salud y público en general interesado en conocer experiencias de carácter intersectorial cuyo objetivo es reducir la accidentalidad vial.

Estas nuevas jornadas abordan la accidentalidad urbana de conductores de ciclomotor y motocicletas como causante del 15% de las víctimas mortales de siniestros viales en España. Si a este porcentaje añadimos el ingrediente, por ejemplo, de la edad de los jóvenes entre 14 y 25 años, las temibles estadísticas de la la DGT reflejan de que son la primera causa de muerte.

El Catálogo de Experiencias en Seguridad Vial está dando sus frutos y medidas planteadas en jornadas como la anunciada por el Ayuntamiento de Dénia, es un claro ejemplo. Si añadimos que la DGT se fija en la seguridad vial urbana pues p’alante como los de Alicante…

El programa de estas jornadas formativas e informativas está dividido en ponencias, mesas redondas y mesas de trabajo y talleres en las que participaran expertos en seguridad vial de toda España, siendo algunos de los temas principales:

*La Carta Europea de Seguridad Vial,

*los cursos de sensibilización y reeducación vial,

*la prevención y campañas relacionadas con la accidentalidad de conductores de ciclomotor y motocicleta,

*la educación vial en los parques infantiles de tráfico,

*la integración de la educación vial en los proyectos educativos y curriculares, así como los recursos didácticos en la educación vial.




Entre las acciones de riesgo como causas de los accidentes de tráfico en los que se ven implicados los jóvenes, las resumo en estas cuatro:

*La falta de experiencia ante situaciones de riesgo,

*la velocidad excesiva e inadecuada asociada a fin de semana,

*el consumo de alcohol y/o drogas al volante,

*el desconocimiento de las consecuencias de la infracción en las normas de tráfico como antesala de los accidentes.

Respecto al último punto, habría que analizar un poco más a fondo la conducta del joven conductor y sacar conclusiones. Sabemos que conoce las normas, es consciente de las consecuencias últimas de los siniestros que se producen en carretera; sin embargo, durante su inicio en la conducción percibe que las autoridades a la hora de sancionar sobre todo en casco urbano, con su complejo mundo de red modificable, pasan por alto las leves infracciones que se cometen. De ahí que, esa permisividad de la conducta pasada por alto, (traducida a riesgo en el tiempo) resultará más peligrosa cuando la conducción pase de vía urbana a vía interurbana.

Por tal motivo, la FUNDACIÓN MAPFRE, con sus campañas itinerantes, a su paso por los municipios nos recuerda y hace alusión a su programa ‘Seguridad Vial para jóvenes’, para evitar que los jóvenes sean víctimas de la siniestralidad vial. En definitiva se trata de que los nuevos y futuros conductores colaboren para hacer de la conducción una actividad más segura.

Gracias a la participación de los ciudadanos en estas jornadas, también se consigue velar para que los jóvenes, que son el futuro del mañana, tomen conciencia. Para ello, hay que hacerles actores y prescriptores de seguridad vial puesto que son ellos con su aptitud y actitud protagonistas de un entorno vial donde tiene que prevalecer en ellos la conduccción responsable y segura ante la conducta competitiva e impulsiva que les lleva cometer imprudencias.

Por tanto es responsabilidad de todas las instituciones y organismos, públicos y privados, hacer lo posible para reducir la siniestralidad. Y no cabe duda, de que con estas campañas formativas e informativas se ayuda a conseguir el objetivo.