1 de septiembre de 2011

Lucha contra los accidentes de motocicletas

El plan de la Dirección General de Tráfico (DGT) para frenar los accidentes de moto está a punto de dar un nuevo paso adelante. A partir del próximo 9 de diciembre, para poder conducir vehículos de dos ruedas de gran cilindrada se exigirá la asistencia a un curso de nueve horas de formación teórica y práctica, además de los dos años de experiencia en potencias intermedias (licencia A-2). Los responsables de Tráfico esperan que la medida contribuya a reducir las cifras de siniestros al evitar que haya conductores que adquieran las motos más veloces ignorando su peligrosidad y las características específicas de su manejo.
La orden ministerial que ayer publicó el BOE establece que de las nueve horas, tres serán de teórica y las otras seis de práctica, y tanto en unas como en otras se hará especial hincapié en la conducción segura. Se suministrará, por ejemplo, información exhaustiva sobre los factores de riesgo de sufrir un accidente y consejos para conducir en condiciones meteorológicas adversas.
CERTIFICADO
Las clases se impartirán en las autoescuelas y otros centros de formación específica que un futuro reglamento permitirá crear. Una vez realizado el curso, el centro expedirá el correspondiente certificado, con el que ya se podrá obtener el permiso de clase A.
Los fabricantes de motos respondieron a la medida con otra dura andanada de las que suelen prodigar contra el Gobierno. La patronal Anesdor aseguró que la orden ministerial "dará la puntilla" a un sector ya muy castigado por la crisis, ya que convertirá a España en el país con el carnet de moto "más caro y difícil de Europa". Y sostuvo que el curso será en realidad un examen que costará a los aspirantes un mínimo de 700 euros, y que "reexaminará a usuarios que necesariamente acumulan dos años de experiencia en conducción real".
ACCESO GRADUAL
 Fuentes de la DGT recordaron que la introducción del curso de formación formaba parte del plan de acceso gradual a la moto de gran cilindrada trazado en el 2009 y consensuado incluso con las asociaciones de motoristas. A instancias de estas se rebajó, por ejemplo, la duración de las clases, que en los borradores iniciales llegaba hasta las 17 horas. Otras fuentes del sector aseguraron también que el coste del curso no superará los 150-200 euros, muy lejos de los 700 de los que habla Anesdor.
El plan de acceso gradual a la gran cilindrada fue fruto del enorme aumento de muertes de motoristas en la carretera que se registró en los años 2006 y 2007. Mientras en los vehículos de cuatro ruedas la siniestralidad no paraba de bajar, en los de dos se disparaba. Pero no es un problema del pasado. Actualmente, la muerte de motoristas en carretera arroja cifras cada vez más preocupantes, muy cercanas a las de los años 2006 y 2005. El pasado fin de semana, por ejemplo, las cuatro motos que sufrieron siniestros mortales eran deportivas de gran cilindrada.

Orden Interna/2323/2011, de 29 de Julio