Hoy daremos
unos pequeños consejos sobre qué hacer si sufrimos una avería fuera
de poblado, es decir, en carretera.
Aquí no contamos con la ventaja de poder disponer
de gente a nuestro alrededor para poder auxiliarnos por lo que lo primero que
debemos tener en cuenta es llevar siempre un teléfono móvil a mano con
la batería cargada, sobre todo ahora que los postes S.O.S. han dejado de
velar por nuestra seguridad a los lados de las carreteras.
Si observamos
que nuestro vehículo se puede quedar detenido por una avería, intentaremos
aprovechar o bien los últimos coletazos de vida en nuestro motor o bien la
propia inercia del vehículo para intentar apartarnos de la vía y
no quedarnos detenidos en medio con el consiguiente peligro.
Lo siguiente
es colocarnos el consabido chaleco reflectante pero ojo, antes
de salir del coche por lo que lo tendremos que llevar en el interior
del habitáculo, ya sea en la guantera, detrás de un asiento o en los
portaobjetos situados en las puertas. Sólo es obligatorio que lo use el
conductor pero es recomendable llevar al menos un par de ellos para que se lo
pueda colocar también nuestro ocupante.
Antes de abrir
la puerta, hay que cerciorarse de que no hay peligro fuera y
que somos perfectamente visibles. Si no, nos bajaremos del vehículo y nos
colocaremos en un lugar seguro, fuera de la carretera y si es posible detrás de
las vallas de protección.
Si por ejemplo
nos hemos quedado parados a la salida de una curva, antes de colocar los
triángulos intentaremos avisar a los otros conductores mediante señales para
evitar que colisionen con nuestro vehículo. Una vez el tráfico haya aminorado,
colocaremos el o los triángulos de señalización.
¿Cómo se
colocan los triángulos? Pues depende: en vías de dos sentidos de
circulación, colocaremos un triángulo por delante y otro por detrás a
una distancia mínima de 50 metros. Si la calzada es de un único sentido (autopista
o autovía) o bien tiene más de tres carriles en el mismo sentido, podemos prescindir
del triángulo delantero. En ambos casos, los triángulos deben ser visibles
a una distancia mínima de 100 metros por lo que si vemos que estamos
próximos a una curva, tendremos que ponerlo a la entrada de la misma para que
el resto de los conductores lo vean perfectamente.
¿Cómo sé la
distancia que he recorrido a pie antes de colocarlo en el suelo? Pues lo más
fácil es contar un mínimo de 50 pasos desde el vehículo hasta
donde coloquemos el triángulo. Si la carretera dispone de hitos de señalización
en los márgenes, como en una autopista por ejemplo, estos suelen estar
colocados a una distancia entre ellos de 50 metros por lo que ya tenemos una
distancia de referencia.
El próximo día
que circuléis por una autopista o autovía, fijaros que entre kilómetro y
kilómetro hay 20 hitos de señalización. Además, suelen estar marcados cada dos
con un número del uno al nueve que quieren decir cien metros, doscientos
metros, etc.