Hace un par de semanas, la DGT
puso en marcha una nueva campaña de vigilancia y control en carreteras
secundarias durante la cual más de 400.000 vehículos fueron inspeccionados por
los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. De ellos, 21.721
conductores fueron sancionados por algún tipo de infracción o regularidad, lo
que supone algo más del cinco por ciento.
Puede no parecer mucho pero si
vemos cada una de las infracciones cometidas por separado y con números,
volvemos a observar como en el caso de las motos que conductas
antirreglamentarias que deberían estar prácticamente erradicadas (por no decir
del todo) siguen suponiendo un gran número.
El exceso de velocidad (recordad
que hablamos de carreteras secundarias, vías de doble carril en una calzada
simple) sigue agrupando el mayor número de denuncias, con un total de 8.833.
Este se encuentra detrás de la mayoría de accidentes que se producen por salida
de vía y que representa un 32% de los accidentes en este tipo de carreteras.
La segunda infracción que ha
acumulado mayor número de denuncias ha sido algo tan asombroso como la no
utilización del cinturón de seguridad. Hablamos de 2.810 personas que con
disculpas tan banales del tipo pero si era sólo para ir hasta ahí o se me
olvidó ponerlo no se dan cuenta de que ese sistema de seguridad pasivo es el
que más vidas salva y que el airbag no sirve de nada si no se usa en conjunción
con el cinturón.
Por último, no llevar la
documentación del vehículo o del conductor cuando circulamos se sitúa en tercer
lugar con 1.358 automovilistas sancionados. Aquí el tema de la Seguridad Vial
la dejamos a un lado porque hablamos de una sanción administrativa.
No quiero finalizar sin comentar
otra temeridad que se ha llevado 1.370 denuncias en total como es las
distracciones al volante. Este número lo obtenemos si juntamos el uso del móvil
al volante (1.006), el uso de auriculares o similares conectados a equipos de
sonido (107), manipulación de pantallas o navegadores (20) y otro tipo de
distracciones (237).
¿Cómo es posible que a estas
alturas y después de tanto tiempo de repetirlo hasta la saciedad, se diga
utilizando el teléfono móvil durante la conducción? ¿La gente no es capaz de
darse cuenta que la sanción económica es mucho mayor que la adquisición e
instalación de un dispositivo de manos libres homologado? ¿Qué su uso no solo
pone nuestra vida en peligro sino también la de los demás? Demasiadas preguntas
para una respuesta tan sencilla como no utilizarlo