En vuestra familia tal vez
tengáis mascota, puede ser cualquier animal de compañía, pero lo
más probable es que sea un perro o un gato. Si es un perro casi seguro que se
querrá ir con vosotros a todas partes como un miembro más de la familia.
Y además de esto vuestros hijos
puede que estén muy encariñados con él y tampoco quieran irse a ninguna parte
sin su mejor amigo peludo de cuatro patas. Si vais a desplazaros en coche con
vuestra mascota tenéis que tener presente que el animal no puede ir de
cualquier manera.
Aquí podéis encontrar una dificultad añadida: que el niño no quiera separarse del perro ni un instante y quiera llevarlo en brazos todo el rato, acariciándolo o jugando con él. Por mucho que adore a su perro o gato, esto no puede ser. No lo permite la ley, no es seguro para vosotros y tampoco es seguro para el propio animal.
Aquí podéis encontrar una dificultad añadida: que el niño no quiera separarse del perro ni un instante y quiera llevarlo en brazos todo el rato, acariciándolo o jugando con él. Por mucho que adore a su perro o gato, esto no puede ser. No lo permite la ley, no es seguro para vosotros y tampoco es seguro para el propio animal.
Primero hay que recordar que al
igual que los adultos y los menores tienen
que ir bien sujetos en el coche, con el cinturón de seguridad o con un sistema
de retención infantil homologado adecuado a su edad, estatura y peso, los
animales también tienen que ir sujetos o al menos de manera que no puedan
interferir de ninguna manera con la conducción.
Un animal suelto en el coche puede distraer al conductor, puede molestarle e interferir sus movimientos (con los pedales, con el cambio o con el volante) y también puede llegar a entorpecer su visión de la carretera: pensemos en un perro que quiere jugar o que está nervioso por ir en coche y que se mueve por todas partes.
Un animal suelto en el coche puede distraer al conductor, puede molestarle e interferir sus movimientos (con los pedales, con el cambio o con el volante) y también puede llegar a entorpecer su visión de la carretera: pensemos en un perro que quiere jugar o que está nervioso por ir en coche y que se mueve por todas partes.
Pero además hay que pensar que el
animal suelto también corre el riesgo de sufrir lesiones en caso de frenazo o
de accidente, pues puede golpearse con elementos del coche o incluso salir
despedido, golpeando a los pasajeros o llegando a salir proyectado fuera del
vehículo.
Es por eso que hay que llevar las mascotas en dispositivos que permitan que por una parte no interfieran con la conducción y que a la vez permita que viajen más seguras. Ya sea en el concesionario de tu automóvil, como accesorio opcional, ya sea en tiendas especializadas en automóvil y también en tiendas especializadas en mascotas, puedes encontrar diferentes soluciones para llevar animales.
Es por eso que hay que llevar las mascotas en dispositivos que permitan que por una parte no interfieran con la conducción y que a la vez permita que viajen más seguras. Ya sea en el concesionario de tu automóvil, como accesorio opcional, ya sea en tiendas especializadas en automóvil y también en tiendas especializadas en mascotas, puedes encontrar diferentes soluciones para llevar animales.
Estas soluciones dependerán del
animal y sobre todo de su tamaño. Para las mascotas no muy grandes como perros
pequeños y medianos, gatos y conejos, puedes optar por un transportín, que
debes colocar en el suelo, entre los asientos traseros, o bien en el maletero.
No lo coloques en el asiento ni lo intentes sujetar con el cinturón de seguridad,
no funciona bien.
Para mascotas no muy grandes también puedes utilizar unos arneses que se sujetan a los anclajes del cinturón de seguridad del asiento. Mejor lleva a tu mascota en las plazas traseras, te distraerá menos y no corres el riesgo de que el airbag frontal del acompañante golpee al animal en caso de accidente.
Para mascotas no muy grandes también puedes utilizar unos arneses que se sujetan a los anclajes del cinturón de seguridad del asiento. Mejor lleva a tu mascota en las plazas traseras, te distraerá menos y no corres el riesgo de que el airbag frontal del acompañante golpee al animal en caso de accidente.
Para los perros más grandes
tendrás que llevarlos en el maletero, para lo que puedes necesitar una red
o reja de separación específica entre el maletero y el habitáculo. Es
recomendable también que sujetes con un arnés al animal, y este a las argollas
de sujeción del maletero, para que tampoco se mueva mucho ni se golpee (por
ejemplo al tomar una curva).
Recuerda también que al igual que sucede con el cinturón o con las sillas infantiles, hay que utilizar estos sistemas siempre y en todas partes, sea un desplazamiento corto por ciudad o una viaje largo por carretera. Si tienes todo esto en cuenta tu mascota y tu familia viajaréis más seguros.
Recuerda también que al igual que sucede con el cinturón o con las sillas infantiles, hay que utilizar estos sistemas siempre y en todas partes, sea un desplazamiento corto por ciudad o una viaje largo por carretera. Si tienes todo esto en cuenta tu mascota y tu familia viajaréis más seguros.