11 de abril de 2015

Colaboración entre usuarios

La vía es un medio que compartimos entre todos los usuarios, por lo que la colaboración es vital. Un usuario de la vía es un conductor de un turismo, pero también lo es un ciclista o un peatón. Cada uno con un propósito, pero con un medio en común. Compartimos espacios por lo que debemos de respetar unos principios básicos.

No molestar. A nadie nos apetece encontrarnos con obstáculos provocados por otros usuarios. El respeto hacia los demás usuarios, no hagas lo que no te gusta que te hagan, básicamente. Siempre pendiente de evitar poner en peligro a los demás.

No sorprender. Conducir haciendo zigzag entre los coches, aparte de estar prohibido, crea cierta ansiedad al resto de conductores al considerar ese comportamiento como impredecible. Nuestra conducción debe ser previsible, señalizando nuestras maniobras con antelación suficiente, para que el resto de conductores puedan actuar en consecuencia. Obligar a actuar precipitadamente, puede llevar a cometer errores, por la falta de tiempo de reacción por ejemplo.

Advertir. Tenemos varias maneras de advertir nuestras intenciones. De forma luminosa con los intermitentes, las luces de freno o emergencia. También con el claxon o con una combinación de éstas. Cuando advertimos nuestra intención a través de un intermitente, por ejemplo, es exactamente eso, advertimos la intención, pero esto no nos otorga ninguna prioridad ni ningún derecho. Si podemos realizar la maniobra, bien, sino no la haremos. Advertimos con la intención de que los demás usuarios lo vean, no sirve de nada advertir si encendemos el intermitente cuando iniciamos la maniobra o el cambio de dirección, siempre con antelación suficiente para que el resto de usuarios puedan actuar en consecuencia.

Comprender. ¿Eres capaz de entender que el conductor que tienes delante se ha equivocado? Depende del día, supongo. Ésta es una de las dificultades que nos encontramos. Deberíamos comprender el error ajeno, ya que ninguno estamos libre de cometerlo en la siguiente esquina. Esto en cuanto a la actitud, pero ¿y en cuanto a la aptitud? Se trata de entender también lo que nos quieren decir, que sepamos lo que quieren decir las señales que nos hacen los demás, tanto conductores de coches, como los ciclistas o los agentes de tráfico, por ejemplo.


Seguramente lo que peor nos sienta es cuando este comportamiento poco cívico se hace con intención. La mayoría somos capaces de comprender los errores de los demás, siempre y cuando no tenga consecuencias, pero cuando no nos respetan es cuando nos sale lo peor. Sobre todo cuando nosotros si seguimos estos principios de colaboración entre usuarios.

Principios básicos para un conductor, que se entremezclan y que en cada momento se nos presentan, juntos y separados. Por ejemplo, ese conductor que en la autovía, de repente y la velocidad alta a la que se circula, hace una maniobra brusca por que se saltaba la salida.

¿Cómo te sientes? Molesto, porque nos ha asustado su comportamiento, nos ha sorprendido, ya que no ha advertido su intención, pero como soy un buen conductor y circulaba con la distancia de seguridad adecuada, he comprendido (aunque no compartido) que se saltaba la salida. Ante errores ajenos debemos estar prevenidos.
Ejemplos hay muchos, ¿verdad?


Fuente :Circula Seguro