24 de junio de 2010

El automóvil y los animales de compañía


Cada año, se producen 14.000 accidentes con animales involucrados. En uno de cada cuatro accidentes se encuentran involucrados perros o gatos, animales de compañía con una muy clara relación con el ser humano.

En el resto de los casos, además de las medidas para evitar que los animales atraviesen las carreteras mediante vallado o pasos, poco se puede hacer.
Ellos no entienden mucho de carreteras y de automóviles. Pero si con los animales salvajes la variable humana se reduce, con los animales de compañía pasa todo lo contrario. Y ahí ellos no tienen ninguna culpa.
Que un automóvil tenga un accidente con un animal de compañía involucrado es un problema que parte de nosotros mismos. Ahora mismo en nuestro país están censadas 9 millones de mascotas y aún así, sus dueños desconocen como han de transportarlos en sus vehículos.

El resultado es similar al de llevar a un niño en la parte de atrás de un coche y frenar de golpe. Ya sean un niño o una mascota, 20 kilogramos cuando se frena a 50 km/h provocan un impacto de 700 kilos de fuerza.
Suficiente para romper el asiento delantero o salir despedidos por el parabrisas. Algo que tendría fatales consecuencias tanto para la mascota como para su transportista. Llevan años enseñándonos ejemplos de ello, pero parece que animal y persona están a niveles distintos. Y no será porque ambos no tienen sus sistemas de retención adecuados.

En el kit básico de un animal de compañía debería incluirse lo necesario para su transporte como lo son los arneses homologados o los transportines.
Si sabes que no aguantan en esa situación, planifica tu viaje. O la mascota se queda en casa al cuidado de un conocido o en un hotel para mascotas o evita su ansiedad con varias paradas para que pueda estirar las piernas. Además a ti también te vendrá bien.
El problema puede estar en la normativa. La legislación para el transporte de animales, no deja las cosas claras ya que únicamente determina que el animal transportado debe estar separado del conductor. Para no molestarle.

Si aún así no se respeta, la infracción es considerada como leve y equivale a una multa de 100 euros.
Otra de los grandes problemas con las mascotas y los accidentes de tráfico está en su abandono. Con la crisis, éstos están aumentando y la cifra de perros abandonados ha aumentado hasta cifras muy elevadas. 100.000 perros abandonados cada año. Un eterno problema que parece que no tiene solución debido a la mente tan corta de muchos propietarios.
Cuando lo abandonan no sólo están denigrando al animal, el cual no tiene culpa ninguna, sino que también esta provocando una situación de riesgo. Condena a muerte para el animal y la posibilidad de que el animal abandonado sea atropellado produciendo un accidente. En este caso conviene que tengamos claro que hacer.
A muchos parece que les da igual que si son identificados, el dueño será el responsable de cualquier daño, desperfecto o accidente. En resumen, la mejor solución contra el atropello de animales consiste en demostrar lo que nos diferencia de ellos.