8 de junio de 2011

Me apunto a moverme en Bici


Con la llegada del buen tiempo, somos muchos los que desempolvamos la bici y nos echamos a pedalear en un intento de hacer algo de deporte, movernos de forma más saludable y barata, o simplemente disfrutar de paseos al atardecer. Además hay que sumar el incentivo que tiene el hecho de que la bicicleta en todas sus formas sea un medio de transporte limpio, fácilmente aparcable, barato y silencioso.

Con todo esto se necesita una buena campaña de concienciación, de recordatorio de las normas generales y sobre todo de énfasis en la seguridad vial que debe conocer tanto cualquier conductor de vehículos a motor, como también los propios ciclistas. El manual básico de qué se puede y qué no se puede hacer, cómo efectuar maniobras circulando en bici y cómo debemos los conductores comportarnos ante la eventual presencia de ciclistas aislados o en grupo. Y la DGT ha estrenado campaña con el sugerente nombre de “Me apunto a moverme en bici“.


Recordemos las normas básicas

Lo primero es un par de conceptos básicos que todos deberíamos tener grabados a fuego en nuestros cerebros: debemos realizar un esfuerzo para hacer real la convivencia de bicicletas y resto de vehículos, y también debemos saber todos cómo actuar en las vías de circulación respetando siempre el código. Esto, que debería ser más que suficiente para evitar sorpresas desagradables en la conducción, tiene que ser reforzado campaña a campaña por el bien de los ciclistas. Y también para recordar a estos últimos que las normas de preferencia funcionan igual para todos, incluyendo las señales viales, semáforos, y demás elementos de la red viaria.

En la carretera (y ciudad, por supuesto), una bicicleta debe ser tratada como un coche en cuanto al volumen que le dejamos libre. Está claro que debe tratarse con más mimo todavía por cuestiones de estabilidad y vulnerabilidad. Esto es especialmente delicado cuando debemos efectuar un adelantamiento, pues es obligatorio dejar la distancia de seguridad lateral suficiente para evitar problemas. En carretera, sabemos que es de al menos 1,5 metros. Más si es posible. Y además recordemos que si hay línea continua podemos adelantar a la bicicleta siempre que lo hagamos en condiciones de seguridad, y como esto es una excepción a la norma general que prohibe adelantar con línea continua, debemos ser muy cuidadosos cuando lo hagamos. Por otro lado, si por el arcén contrario circula un ciclista o un grupo, no es posible adelantar a un coche.

Los ciclistas tienen que saber que deben facilitar al máximo todas las maniobras. Ser ciclista no da la potestad absoluta sobre la vía, hay que tener en cuenta lo que podemos perder si hacemos un mal uso de nuestros derechos como tal. Siempre con casco en vías interurbanas, y bien visibles, con materiales reflectantes y luces cuando cae la noche.

En intersecciones especial cuidado

Salvo en el caso de que existan carriles específicos (carril bici por ejemplo), las normas de preferencia son iguales para todos. En el caso de ciclistas, las intersecciones y las glorietas son un punto crítico porque en todo caso son vehículos que circulan a velocidades reducidas y tienen un margen de maniobra bastante parco. La respuesta del motor es el propio ciclista con su pedaleo, por eso los coches deben tener especial cuidado y ser pacientes en grado sumo ante un grupo o un ciclista solitario.

La forma más sencilla de resumir lo que debemos saber al volante cuando nos encontramos con un ciclista es que son la parte más frágil del conjunto de vehículos que están en ese momento en nuestro campo de “actuación”. Debemos dejarles el espacio y el margen suficiente para que puedan maniobrar, y poner especial cuidado al pasar cerca de ellos, pues su carrocería es frágil e inestable. A la vez, los ciclistas deben ser conscientes de sus limitaciones y poner de su parte para facilitar al máximo la circulación de “los otros”. La convivencia, que es con lo que arranca el vídeo que os mostramos arriba, es básica para que una salida en bicicleta sea solamente placentera y saludable. Siempre hay que tener cuidado, pero ahora es un buen momento para recordar a todos estos principios básicos de circulación, que todos conocemos cuando nos dan el “APTO” en el exámen de conducir, pero que no debemos olvidar nunca.