28 de diciembre de 2011

Países Bajos, donde las carreteras se adaptan a las personas

Acabamos el repaso a las políticas viales de los tres países más seguros de Europa que hemos ido dando de la mano de Profesores y Seguridad Vial y lo hacemos, tras hablar de Suecia y Reino Unido, abordando los Países Bajos, el país de la bicicleta por excelencia, donde se parte de la realidad palpable para llegar a la norma, siguiendo un modelo basado en el concepto de “seguridad sostenible“.
La seguridad sostenible comparte origen con la Visión Cero de Suecia, pero para reducir la probabilidad de siniestros los holandeses ahondan en la adaptación de las infraestructuras al factor humano y, de forma secundaria, en la mejora de la seguridad de los vehículos. Y este es un esquema que les ha reportado unos resultados esperanzadores, dejando su mortalidad vial en 39 personas por millón de habitantes, la misma cifra que el país escandinavo.
A diferencia del ejercicio sueco, basado en la educación inicial, las autoridades de los Países Bajos parten del principio delimitaciones que tiene el ser humano por naturaleza, y en función de esas limitaciones realizan los cambios necesarios en el diseño de las infraestructuras.
Esta idea se asienta en tres puntos: funcionalidad, homogeneidad y predictibilidad del uso de las vías, y en función de esos tres parámetros se categorizan las vías holandesas en cuatro grupos funcionales:
  • vías de flujo, que unen largas distancias, soportan mayor volumen de tráfico y más velocidad,
  • vías de distribución, que unen medias distancias y sirven como conexión regional,
  • vías de acceso, compuestas por las vías de entrada y salida a la carretera,
  • vías residenciales, que se equiparan a las vías de las zonas urbanas.
Con esta clasificación, las autoridades pueden ajustar las infraestructuras y las normas al tipo de la vía y los usuarios puedan usarlas de una forma más funcional, homogénea y predecible, lo que redunda en un aumento de la seguridad vial del país.

La educación vial, en el centro de la diana 
Aunque como este modelo data de los años 90 y de hecho se está implantando, los responsables holandeses apuntan a la educación vial como herramienta imprescindible para el reciclaje de los conductores, que debe centrarse en el porqué y el para qué de la seguridad sostenible para conseguir la implicación de los ciudadanos en una tarea que no es fácil. Por otra parte, junto a la educación en las escuelas se promueven campañas de concienciación y participación pública.
Y este es un punto que tienen en común las tres políticas que hemos ido desgranando. Tanto Suecia, como Reino Unido como Países Bajos tienen una estrategia que contempla la educación vial como el núcleo de toda mejora de la seguridad. En el caso sueco, vimos que la formación continua era la clave, en Reino Unido, las acciones en escuelas pero sobre todo a través de los medios de comunicación eran imprescindibles. En los Países Bajos, por su parte, se promueve la participación ciudadana.
Aquí me permito rescatar un vídeo que me llamó la atención hace unos días sobre cómo la bicicleta ganó la batalla al coche en los Países Bajos, y que dice mucho del interés de los gobernantes holandeses por tener en cuenta la opinión y la participación de los ciudadanos de aquel país. Se trata de un reportaje muy interesante que, pese a estar en inglés y no tener más subtítulos que en esa misma lengua, se entiende muy bien y desde luego vale la pena verlo:
Como cierre para este monográfico sobre las estrategias que hacen de Suecia, Reino Unido y Países Bajos los estados europeos más seguros, podemos destacar un factor común a los tres, que es fijar objetivos a medio y largo plazo. Quizá lo más importante no es si se consigue o no el número, sino que la seguridad vial goza de un espacio propio en la vida cotidiana de aquellos países, lo que podemos interpretar como una inspiración para el caso español. Si no teniendo la misma presencia ni la misma aceptación social hemos visto reducida nuestra siniestralidad vial de forma muy respetable, ¿qué no haremos el día que abordemos verdaderamente la cuestión entre todos?