La ley fue aprobada en el Congreso hace un mes y obliga a su regulación. Los usuarios necesitarán un documento técnico, no podrán exceder los 25km/h, deberán circular por carretera y regirse a la misma normativa del vehículo.
El objetivo de la DGT es acabar con la imagen del patinete eléctrico como medio de transporte usado en aceras y sorteando peatones, ya que las velocidades alcanzadas por estos vehículos pueden causar graves daños para conductores y viandantes. Esto quedará totalmente prohibido y los usuarios que se excedan se enfrentarán a duras sanciones