11 de diciembre de 2011

¿Conocemos las normas de circulación?: sobre las revisiones periódicas del vehículo


Entre las causas que motivan los siniestros viales están los debidos a fallos o defectos mecánicos en los vehículos implicados. De ahí, la importancia de mantener el vehículo en buenas condiciones y de vez en cuando mirar la presión de sus neumáticos como tanto insistimos desde Circula Seguro. Para cuestiones más de fondo, como la revisión de los frenos, dirección, suspensión, ante un largo viaje programado, siempre es conveniente pasar por un taller coincida o no con la revisión de nuestro coche.

No olvidemos que el automóvil, al que tanta guerra le damos, es una máquina y por tanto no está exento de sufrir algún tipo de fallo a lo largo de su vida. Por eso, la normativa actual establece que los vehículos matriculados o puestos en circulación deben someterse a una inspección técnica periódica (ITV) en cualquiera de las estaciones autorizadas por Industria, ya sea Estatal o autonómica, y garantice que el vehículo se encuentra en condiciones óptimas para la seguridad de sus ocupantes y del resto de usuarios.

Las estaciones ITV inspeccionan los vehículos previo pago de una tasa
A través de la DGT se puede consultar dónde podemos realizar la Inspección Técnica de nuestro vehículo. Una vez elegida la estación ITV pedimos una cita (por teléfono o internet) para que nos realicen la inspección. Veamos en este vídeo algunas instrucciones sobre cómo se realiza la inspección técnica:
Dicho sea de paso, nuestro turismo, (al igual que las motocicletas), está exento hasta los cuatro años de pasar la inspección técnica. Una vez cumplidos los cuatro años desde su primera matriculación la frecuencia de la ITV será bienal hasta los diez años. Pasados esos diez años los turismos tienen que someterse todos los años a una nueva inspección.

Como dicha obligatoriedad es para todos los vehículos homologados por Industria, a título de consulta, os cito una página web, en este caso de la Junta de Extremadura, sobre la frecuencia de las inspecciones técnicas del resto de vehículos. Se trata de una tabla confeccionada en base a lo dispuesto en Reglamento General de Vehículos sobre la periodicidad en las inspecciones y algunas modificaciones sobre la homologación de vehículos.

Pasar la ITV, además de necesaria, salva vidas

Quizás convenga recordar que, como muchas cosas en esta vida, los coches también requieren si no una renovación con el paso de los años, sí que necesitan de unos cuidados y un mantenimiento para que su funcionamiento sea óptimo. A veces puede resultar caro o engorroso, pero no creo que unos cuantos euros de más en la cartera sean razón suficiente para jugarse la vida y la de los demás en la carretera.

Hay que tener en cuenta que según aumenta la edad de nuestro vehículo será más propenso a sufrir desgastes en sus principales órganos de motor. Según una leyenda urbana, a partir de los seis años, si hemos descuidado el mantenimiento de nuestro vehículo, éste empieza a tener problemas en el sistema de alumbrado, defectos en los ejes, ruedas, neumáticos y frenos. Sin contar que, ante una nueva inspección periódica, posiblemente no supere la revisión de las emisiones contaminantes.



El nivel de emisión de CO2 vendrá recogido en la tarjeta ITV
Os pongo al corriente sobre algunas de las novedades sobre las inspecciones técnicas. A partir del verano del año que viene, según se desprende de una Orden del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, los fabricantes de automóviles estarán obligados a incluir en las tarjetas de la ITV el nivel de emisiones de dióxido de carbono de cada uno de sus modelos o de las correspondientes versiones. Con esta medida la Comisión Europea realizará un seguimiento sobre los niveles de emisiones de CO2 comercializados en cada Estado miembro y si se están llevando a cabo la reducción de estas emisiones.

Aprovechando dicha novedad también se modificarán las tarjetas ITV. Éstas serán sustituidas por un nuevo formato en papel impreso y con fondo en tinta azul o por tarjetas de soporte electrónico elaboradas de forma que no sea posible su falsificación. Otra de las novedades que también se pretende se lleve a cabo es la del registro del kilometraje del vehículo una vez realizada en la estación ITV la correspondiente inspección para su constancia y posterior anotación oficial.

Documentación que por cierto es obligatoria llevarla en el vehículo en todo momento. Me refiero al permiso de circulación y a la tarjeta de inspección técnica del vehículo. En cuanto a la tramitación de la nueva inspección periódica no se nos puede olvidar pedir copia del informe de la inspección que acredita junto con el sello estampado en la tarjeta ITV que se ha superado así como colocar la pegatina que nos den, (por dentro del vehículo, legible y visible por fuera) en la parte superior derecha del parabrisas delantero con la fecha (mes y año) propuesta para la próxima revisión.

El incumplimiento a dichas normas, así como no someterse a las inspecciones periódicas es jugársela a que en caso de sufrir un accidente o incidente la compañía de seguros nos ponga pegas a la hora de la reclamación por daños y perjuicios independientemente de la responsabilidad que se tenga en relación al siniestro. Por otro lado, si un conductor es sometido a un control sobre documentación y no acredita haber pasado la ITV periódica, el agente de tráfico sanciona con una multa de 200€ y le expedirá un justificante únicamente válido por diez días para poder circular hasta un centro de ITV y así poder realizar la revisión.

También, en el caso de circular con la inspección técnica desfavorable, además de aplicar la misma sanción anterior, cabe la posibilidad, por parte del agente, de la inmovilización de nuestro vehículo si el resultado de dicha inspección presenta deficiencias que constituyan un riesgo especialmente grave para la seguridad vial.

Para terminar, pienso que la renovación del parque móvil traería consigo una mejora en las cifras de siniestralidad

Incumplir o escaquearse de las inspecciones periódicas sería todo lo contrario, ya que las inspecciones no son el problema. El problema está en los fallos mecánicos que no son corregidos.